16- Sincondrosis esfenobasilar
La sincondrosis esfenobasilar (SEB) es una articulación fibrosa presente en el cráneo, específicamente entre el hueso esfenoides y la porción basal del hueso occipital. Esta articulación es de naturaleza cartilaginosa y permite un ligero movimiento entre estos dos huesos.
La SEB es un concepto importante en la terapia craneosacral, que fue desarrollada por William Garner Sutherland, un osteópata estadounidense. Sutherland postuló que la SEB tenía una capacidad inherente de movimiento rítmico y sutil, que denominó «movimiento respiratorio primario». Este movimiento se cree que es generado por la fluctuación del líquido cefalorraquídeo en el sistema craneosacral.
Según Sutherland, el movimiento respiratorio primario es esencial para la salud y el equilibrio del organismo. Cualquier restricción o disfunción en la SEB puede afectar negativamente el flujo del líquido cefalorraquídeo y, por lo tanto, interferir con la función adecuada del sistema nervioso central y otros sistemas del cuerpo.
En la terapia craneosacral, los terapeutas utilizan técnicas suaves y sutiles para evaluar y corregir cualquier restricción o desequilibrio en la SEB. Esto se hace mediante la aplicación de una ligera presión y movimientos específicos en el cráneo, con el objetivo de restaurar el flujo normal del líquido cefalorraquídeo y promover la autocuración del organismo.
Sutherland decía que la S.E.B. era el yo de la persona.
El esfenoides y el occipital (huesos medianos) forman la articulación principal en la sincondrosis esfenobasilar de la base del cráneo. Ésta permanece como una unión cartilaginosa hasta los 25 años y a partir de entonces adquiere la elasticidad de hueso esponjoso.
Esta articulación presenta cierta convexidad en su superficie superior que se incrementa levemente cuando se flexiona. El movimiento de cada hueso mediano se produce alrededor de un eje transversal. Los demás huesos medianos del mecanismo son el etmoides, el vómer y el sacro; estos se mueven durante el ciclo bifásico en respuesta a la tracción o a la influencia de las membranas durales, que actúan en función del enrollamiento o el desenrollamiento del SNC y de la fluctuación del LCR.
Diferencia entre sínfisis y sincondrosis.
Sínfisis: articulaciones caracterizadas por su escasísima movilidad y porque la unión entre los dos huesos se efectúa por medio de un fibrocartílago. Cuando este cartílago llamado ligamento interóseo, cubre en toda su extensión las superficies articulares, la articulación correspondiente recibe el nombre de anfiartrosis verdadera, recibiendo el nombre de diartroanfiartrosis cuando presente en su parte central una hendidura más o menos desarrollada. Pertenecen a estas últimas la sínfisis del pubis y la sacroiliaca.
Sincondrosis: dícese de la sinartrosis con sustancia interpuesta cartilaginosa, esto es, las constituidas por dos superficies óseas unidas entre sí por un cartílago intermedio. Este cartílago está íntimamente adherido a una y otra de las dos piezas óseas. Como ejemplo de sincondrosis cabe citar la articulación del cuerpo del esfenoides con la apófisis basilar del occipital.
En la SEB Sutherland diferenció lesiones primarias y secundarias.
Las primarias tienen su origen en la propia articulación. Ha habido un traumatismo y necesitan un tratamiento en la propia SEB.
- Tensión lateral.
- Tensión vertical
- Compresión/Descompresión.
En las secundarias el origen de la lesión se encuentra fuera de la SEB, pero afecta a su movimiento. El tratamiento debe aplicarse en el origen. Hay algo que afecta a la flexión-extensión.
- Flexión-Extensión
- Torsión
- Lateroflexión.
El esfenoides es importante porque está en contacto con todos los huesos de la bóveda. También es importante porque está en contacto con las membranas intracraneales. Por este motivo cualquier tensión en las membranas intracraneales alterará el esfenoides y al contrario también.
Destacar también la importancia de la SEB porque es el asiento de la hipófisis, de ahí su importancia en el sistema endocrino.
El cuerpo está sujeto a estrés y tensiones desde antes del nacimiento hasta la muerte. Las presiones y las fuerzas afectan al feto en vías de desarrollo, al recién nacido durante el parto y al individuo durante la infancia, la adolescencia y la adultez. Estas fuerzas producen distorsiones menores y mayores del cráneo que determinan tensiones en la sincondrosis esfenobasilar (SEB) Cuando se introduce una tensión, se compromete la eficiencia del MRP. El compromiso puede ser menor o mayor en función de su efecto sobre la salud de la persona.
LESIONES DE LA BASE CRANEAL SEÚN SUTHERLAND
(En orden creciente de gravedad)
- Flexión
- Extensión
- Torsión
- Lateroflexión
- Tensión lateral
- Tensión vertical
- Compresión
ZONA NEUTRAL
La lesión se denomina por el lado de máximo movimiento, pero la lesión está del lado contrario. El lado de mayor movimiento es el lado de más llenado. Este llenado ayuda a la corrección.
Lo que nos va a interesar es si los tejidos aceptan este tipo de impulsión o no la aceptan.
Los test de movilidad nos van a dar una respuesta franca. Al contrario de lo que se cree las lesiones craneales se ponen fácilmente en evidencia porque el sistema obedece a la ley del todo o nada, es decir, que si se mueve es normal y si no, no se mueve en absoluto. Entonces no hay duda cuando sepamos conocer una lesión ya lo sabremos definitivamente. Este no es el caso para las otras partes del cuerpo.
La fisiología no puede ser pura. Para tener un movimiento puro necesitamos una simetría perfecta.
Si el occipital está bajo por el lado derecho, podemos entender que el esfenoides se adaptará a esta posición. Pero también el esfenoides avanza por el lado opuesto, es decir, que va avanzar por el lado izquierdo.
Existe un movimiento de lateroflexión del sistema. La rotación se hace por el lado derecho para los dos huesos, pero la lateroflexión se hace a la izquierda. Tenemos una escoliosis craneal a convexidad derecha.
Hay una concavidad izquierda y una convexidad derecha y una rotación derecha. Esto es fisiología y así somos.
Tenemos un occipital bajo a la derecha un sacro bajo a la derecha, una rotación derecha del occipital y una rotación izquierda del sacro.
Un avance del occipital a la izquierda que va a imbricarse dentro de la sutura para soldarla. Así es como somos todos y eso se llama lateroflexión rotación derecha esfenobasilar.
DATOS IMPORTANTES QUE HAY QUE RECORDAR
- La articulación esfenobasilar es una sincondrosis (una barra cartilaginosa) que no tiene la tendencia de mantener las lesiones.
- El ritmo craneal, pese a las perturbaciones que en él provoca una disfunción esfenobasilar, sigue manteniendo su ciclo normal de flexión y extensión.
- La compresión y descompresión de la SEB intentará:
- a) Poner de manifiesto todas las lesiones esfeno-basilares presentes en cada paciente mediante su evaluación y tratamiento
- b) Normalizar el 90% de las disfunciones esfeno-basilares.
- Cada disfunción esfeno-basilar se denominará tras someter a prueba su movimiento máximo en distancia o en tiempo. El lado que tiene mayor rango de movimiento es por el que se define: cuando la torsión del lado derecho es mayor que la del lado izquierdo se habla de disfunción en torsión derecha.
- La normalización de cada disfunción esfeno-basilar se puede realizar estabilizando primero el occipital y movilizando el esfenoides en el sentido de su rango de movilidad máxima (la mencionada dirección de la disfunción), permitiendo así su liberación.
- La normalización (liberación) ocurre cuando tratamos el sentido de movimiento de mayor amplitud llevándolo más allá de la zona neutral o línea media, apareciendo la sensación de relajación (ensanchamiento)
PROCEDIMIENTO
En el momento en el cuál el esfenoides va a empujar para volver a su posición fisiológica, es decir, que habría exagerado tanto la patología que esto no podría ser más posible, el cuerpo tiene una respuesta por el principio de la compensación y hace retroceder el esfenoides. Pero esto ocurre en dos o en tres tiempos. Hay que entender primero que el sistema es visco elástico; un sistema elástico contesta rápidamente a la solicitación, es como si colocásemos un peso en un muelle, pero a este nivel hay muy poca fibra elástica. Entonces es la viscosidad la que nos interesa. La viscosidad es como si fuera un pistón lleno de aceite. Y la propiedad mecánica de la viscosidad en el cuerpo humano es la lentitud de ejecución.
A menudo durante este tiempo se crea un punto muerto. Quiere decir que el mecanismo de flexión y extensión se para cuándo percibes este punto muerto, quiere decir que la normalización se está ejecutando, mantenéis la presión y os quedáis a la escucha porque sabéis que en poco tiempo vais a escuchar la respuesta.
No hay que tener prisa porque se puede crear un cierre del sistema y reforzar la lesión del esfenoides
Es muy importante saber que el cuerpo del otro es mejor que vosotros cualquiera que sea el valor de vuestras manos. La herramienta principal son vuestras manos más el paciente. Con vuestras manos le dais indicaciones, pero es el paciente el que hace el trabajo.
DISFUNCIÓN DE LA TORSIÓN
Eje anteroposterior
Es mejor visualizar tumbado, entonces es como el volante de un camionero.
El test se hace en la extensión; se induce el ala hacia abajo (los pies) primero y luego en la siguiente extensión se hace una inducción hacia mí del otro lado. Se observa la calidad del retorno, de qué lado ha ido más y se emplea la técnica indirecta. Es decir, se impulsa hacia donde más movimiento tenía y se mantiene ahí hasta que se relajan los tejidos. Luego se comprueba otra vez y se hace la técnica directa, empujando hacia donde estaba la restricción.
La lesión se nombra por el recorrido más amplio
A menudo son lesiones sacrolumbares.
LATEROFLEXIÓN
Eje vertical
Vamos a pedir al esfenoides que se balancee a un lado y luego al otro en la extensión.
El lado en el que el ala mayor suba más hacia el techo es por el que se nombra la lesión
En la extensión se le pide al ala derecha que suba, y en la siguiente extensión al ala izquierda. En el lado que más ha subido se aplica la técnica indirecta, es decir, se mantiene hasta que se relajan los tejidos y hay un deseo de volver. Luego pasamos a la técnica directa vemos como vuelve al lado contrario y si hemos ganado un 50% nos damos por satisfechos.
Cuando se combina el test hay que hacerlo en fase neutra.
La lateroflexión es una rotación de los dos huesos a la derecha con lateroflexión a la izquierda
A menudo lesiones sacrolumbares.
TENSIÓN LATERAL (LATERAL STRAIN)
Eje vertical. Los dos giran en el mismo sentido
Lesión primaria que altera la flexión-extensión
La consecuencia en el RCS es importante. La propia unión de los dos huesos está alterada. Ha existido un traumatismo. Puede venir de la etapa intrauterina, ventosas, fórceps, etc.
En este caso hay un desencaje una dislocación.
Test: nos olvidamos del RCS. Invitamos al lado de mayor movimiento y esperamos rechazo.
Como el carro de una máquina de escribir
El tratamiento son técnicas directas en el sentido del movimiento facilitado, no hay que luchar contra la restricción.
TENSIÓN VERTICAL (VERTICAL STRAIN)
- Eje transversal
- Lesión primaria
- Sentido de rotación ambos iguales alterando la flexión-extensión normal.
- Tenemos en cuenta el RCS
- Test: como si abriéramos un cajón y como si cerráramos, moviendo el esfenoides y dejando quieto el occipital
- Aplicamos técnica indirecta
- En la flexión intencionamos hacia los pies
- En la extensión intencionamos hacia nosotros.
COMPRESION
No eje, no rotación, no flexión ni extensión
Lesión primaria. Hay que dedicarle mucho tiempo hasta que ceda.
Diferentes grados de la compresión
Mínima: afectado, pero no bloquea al 100%
Máxima: afecta a todas las articulaciones de la SEB
Técnica: indirecta. Comprimimos dejamos que resuelva y luego subimos al techo.
En resumen, la sincondrosis esfenobasilar (SEB) es una articulación fibrosa entre el hueso esfenoides y la porción basal del hueso occipital. El movimiento respiratorio primario asociado con la SEB es un componente fundamental en la terapia craneosacral y se cree que tiene un impacto significativo en la salud y el equilibrio del organismo. Los terapeutas craneosacrales utilizan técnicas suaves para evaluar y corregir cualquier restricción en la SEB, con el fin de restaurar el flujo adecuado del líquido cefalorraquídeo y promover la autocuración.