Kinesiología. Historia test muscular
La kinesiología es una disciplina que se centra en el estudio del movimiento humano y su relación con la salud y el bienestar. Aunque la kinesiología moderna abarca varios campos, como la rehabilitación física, el rendimiento deportivo y la ergonomía, en este contexto nos referiremos específicamente a la kinesiología aplicada, que se enfoca en la evaluación de la función muscular a través de pruebas de respuesta muscular.
La historia del test muscular en la kinesiología aplicada se atribuye principalmente a George J. Goodheart Jr., un quiropráctico estadounidense que desarrolló el método en la década de 1960. Goodheart observó que algunos músculos parecían debilitarse o fortalecerse en respuesta a determinados estímulos, como el contacto con puntos de acupuntura o el consumo de ciertos alimentos.
A partir de estas observaciones, Goodheart desarrolló el test muscular, que consiste en aplicar una presión suave sobre un músculo mientras se le pide al individuo que resista el movimiento. Según la respuesta muscular, se puede inferir información sobre posibles desequilibrios en el cuerpo, como disfunciones en los sistemas musculoesquelético, nervioso, circulatorio, linfático o energético.
El test muscular se basa en la premisa de que el cuerpo humano es un sistema integrado en el que todos los sistemas están interconectados. Según la kinesiología aplicada, los músculos reflejan el estado de salud y funcionamiento de estos sistemas, y a través del test muscular se puede obtener información sobre posibles bloqueos, desequilibrios o tensiones en el organismo.
El psiquiatra John Diamond fue el primer profesional de la salud mental, que usó el sistema de meridianos de energía para diagnosticar y tratar problemas emocionales. Formado originalmente en la Kinesiología Aplicada, Diamond (1979) introdujo el test de resistencia muscular, como un método para evaluar el flujo de energía a través de los meridianos y sus alteraciones, producidas por estresores tanto físicos como emocionales.
Posteriormente, y basado en estos trabajos, el especialista en Kinesiología Aplicada y Quiropráctico George Goodheart lo desarrolló aún más y el test de resistencia muscular es actualmente la piedra fundamental de los procedimientos diagnósticos de las terapias basadas en la energía.
Experimentando con la resistencia muscular, Goodheart observó que un individuo tenía un tono muscular firme cuando pensaba en algo placentero, y por el contrario cuando pensaba en algo displacentero el tono del músculo se debilitaba. Lo mismo sucedía cuando pensaba en algún hecho que era verdadero versus algo falso. Dedujo entonces que la integridad energética del cuerpo, está comprometida cuando el pensamiento produce estrés o la información es falsa y se evidencia con una respuesta muscular de debilidad.
El “TEST DE RESISTENCIA MUSCULAR” es un arte y como todo arte, hace falta práctica para volverse experto en el mismo.
Es como aprender a tocar un instrumento musical, no basta con saber las posiciones de las manos, necesitamos practicar y mucho hasta lograr la maestría.
Con el “Test Muscular” podemos valorar la energía que el sistema “cuerpo/mente” aporta al músculo para que este funcione.
Cualquier alteración en el flujo de energía del cuerpo producido por una emoción, un problema físico o nutricional, se puede detectar por el test muscular.
Es una manera rápida y eficaz de comunicarse con el cuerpo sin la participación consciente de la persona. Haciendo una leve presión sobre un músculo y evaluando la respuesta del tono muscular, tono que está relacionado directamente con los centros emocionales que lo fijan. Esto nos permite establecer con el cuerpo del consultante un código binario de comunicación, por SÍ o por NO, a través del cual se obtiene la información que se necesita
Es un método sencillo e inocuo y sin embargo eficaz de “entablar un diálogo” con el cuerpo, abrir su sabiduría y sacar provecho de lo que trasmite. Gracias a los test musculares podemos explorar el “bioordenador” que constituye el organismo. En nuestra base de datos internos se halla almacenada toda la información necesaria para conservar la salud y la capacidad de rendimiento del cuerpo.
De acuerdo a este modelo, se puede usar este test como un mecanismo específico de retroalimentación para guiarse en los procedimientos diagnósticos y verificar los efectos de los tratamientos.
Se debe tener cautela, sin embargo, acerca del uso y la interpretación de la respuesta del test muscular, porque hay varios factores que pueden afectarla.
Se requiere un entrenamiento adecuado, conocimiento y experiencia en su uso, y en el uso de todos los métodos de tratamiento referidos, para la óptima aplicación de estas terapias.
¿Qué pasa con niños pequeños, enfermos o animales?
TESTEO MUSCULAR por subrogado: se usa en caso de necesitar diagnosticar a un bebé, un niño pequeño, un anciano o persona muy debilitada, o un animal o una planta.
Se utiliza para el diagnóstico, el principio de la conducción de la energía, con una persona, animal o planta que no puede ser testeado directamente.
Cuando la persona a ser testeada sostiene una sustancia determinada el músculo del subrogado responde indicando si la persona es sensible a ella.
El subrogado (otra persona) toca la piel de la persona, o animal/, o planta a ser testeado y el testeador testea al subrogado.
Las correcciones se pueden hacer también en el subrogado, en el caso de no ser posible hacerlas en el testeado.
El testeo muscular para identificar alergias alimentarias está avalado por un estudio piloto, denominado CORRELACION DE LOS HALLAZGOS POR TESTEO MUSCULAR DE KINESIOLOGIA APLICADA CON NIVELES DE INMUNOGLOBULINA SERICA PARA ALERGIAS ALIMENTARIAS – Agosto l998.El resultado de este estudio demostró un 90.5% de eficacia en la detección de las alergias a través de la respuesta neuromuscular.